Supongo que cada uno de vosotros tendréis un momento especial del
día en el que os podéis relajar o disfrutar con vuestros peques al máximo.
Mi momento mágico en la actualidad es
antes del baño del peque, me tumbo en el sofá, Eric se sienta a mi lado, coge
uno de sus libros de Nacho y se pone a leer un ratito a su hermana.
El momento cuento es uno de los más
esperados por mi hijo desde que casi un bebé y que ahora decida compartirlo con
su hermana, haciéndola participe, me parece simplemente precioso.
Se pone muy serio y le dice "Irene te
acuerdas que ayer nos quedamos por... (y le cuenta el argumento del libro),
vamos a ver qué pasa hoy". Eric lee a la tripa, directamente a su hermana
y es precioso.
Hay días que solo lee dos páginas y otros
que lee casi el libro entero pero no importa la cantidad de lectura sino la importancia
de convertir ese momento mágico del cuento en un momento de los 3 juntos, en el
que el bebé ya forma parte de él.
Comenté el día de mi conferencia en el
salón de Bebés y Mamás que una de las mejores formas de conectar con el bebé,
de hablarle, de buscar un rato tranquilo con él y establecer un vínculo era el
momento del cuento. Con mi hijo mayor tanto su padre como yo le leímos muchísimos
cuentos mientras estaba en la barriga, la melodía de la voz mientras narras, la
tranquilidad de estar tumbados hacía que fuese un momento especial. Ahora en
este segundo embarazo ese momento lo comparto con mi hijo mayor, haciéndole partícipe
principal y creando un vínculo con su hermana muy especial.
¿No os parece precioso? Sé que cuando
Irene esté fuera de la barriga va a tener un gran Hermano Mayor que le va a
leer muchos cuentos.
¡Me como a mi hijo!