Bebés fáciles y madres más relajadas

Qué Irene es un bebé mucho más fácil de lo que fue su hermano es una realidad pero que yo también me estoy tomando esta maternidad con mucha más calma es un hecho.

Es cierto que la princesa no ha tenido cólicos, no llora, duerme como una marmota y es muy conformista (algún día os hablaré con más detenimiento de las diferencias entre los dos hermanos), pero yo tampoco soy tan cuadriculada.

Con Eric todo era nuevo y era muy, muy rígida, los horarios del bebé eran sagrados, las comidas estaban muy controladas, no solo la cantidad que debía comer de cada cosa sino los momentos en los que debíamos introducir nuevos alimentos, le pesaba, le medía...

Con la peque todo esto ha pasado a un segundo plano, los horarios son los del mayor, si un día no se baña no pasa nada, si un día hay que salir más pronto o más tarde pues nos adaptamos y punto. Con la comida estoy siendo muchísimo, pero muchísimo más flexible y es que mi princesa es de poco comer, o mejor dicho de comer cuando le da la gana. Nada de horarios establecidos cada 4 horas ni pitos ni flautas... ella desayuna, come, merienda y cena cuando quiere y si le da la gana, que tiene unas formas de cerrar el pico cuando quiere que ni con una taladradora podrías despegarlos.

Veo que está activa, contenta, que crece mucho (demasiado, sigue saliéndose en las tablas de altura), que coge peso y por eso ni me molesto en agobiarme. Es cierto que me ha costado conseguir este estado zen con la comida porque Eric era un buzón en el que podías meter comida sin parar y el cambio ha sido brusco pero ahora ni me preocupo, ya comerá más tarde me dice mi padre y qué razón lleva.

Me he dado cuenta que esta "relajación maternal" me hace disfrutar aún más de mi pequeña, así es que todos felices.

¿Te paso lo mismo con tus segundas/terceras maternidades?