3 meses

Mi pequeña princesa ya tiene tres meses y está para comérsela enterita. ¡Tres meses ya! sé que cada mes digo lo mismo pero es que el tiempo se me está pasando a una velocidad que da vértigo. Sigue siendo una niña súper simpática que se pasa el día sonriendo a todo el mundo pero con quien más se rie es con su hermano del alma, es verle aparecer por la puerta y se pone a mover brazos y piernas como una loquilla y a sonreír. 

Es una niña con un percentil muy alto en altura y percentil normal en peso, en esto ha salido igual que su hermano.

Sus balbuceos han aumentado y se puede tirar un rato de "charla" con alguno de nosotros, lo anecdótico es que no la gusta hablar sola, tenemos que estar cerquita de ella para que se ponga a parlotear, le gusta que la escuchen.

Se mueve muchísimo, está todo el rato moviendo piernas y brazos con una fuerza impresionante y ha empezado a voltearse hacia los lados cuando oye algo que le interesa y en un par de ocasiones se ha puesto boca abajo, también está aprendiendo a darse la vuelta si la ponemos boca abajo en casi todas las ocasiones sabe darse la vuelta sola y ponerse boca arriba.

El sueño sigue siendo muy bueno, duerme una mini siesta por la mañana cuando llevamos al hermano al cole y otra grande antes de comer, por la tarde intentamos que duerma otra siesta grande para que descanse y otra mini siesta aunque si tiene muchos estímulos es misión imposible y por la noche sigue despertándose tan sólo una vez sobre las 4 o 5 de la mañana.

Es una niña que se entretiene bastante tiempo en la hamaca o en la manta de actividades jugando con los juguetes del gimnasio, para mí esto es una novedad porque su hermano no lo hacía, necesitaba contacto todo el tiempo.

Le gusta ir en carrito pero le encanta estar en el fular de porteo, va tan feliz mirando todo y cuando se cansa se echa unos sueños muy relajantes y a mí me encanta tenerla tan cerquita e ir dándola besitos.

Se ha descubierto las manos e intenta tocarnos o tocar las cosas que le llaman la atención a parte de pasarse medio día con las manitas en la boca y es que ¡están tan ricas!

Estamos disfrutando mucho con nuestra pequeña, ¿se nota verdad?