Reciclando juguetes

Una de las frases preferidas de mi marido es que "Eric re-descubre los juguetes y que no juega con ellos como lo hacía cuando tenía un año ni lo hace como lo hará cuando tenga tres".

Hay juguetes que ya no utiliza porque eran más de bebés y otros que los estamos transformando para usarlos en este momento con otras aplicaciones.

Uno de los últimos que ha sufrido esta transformación es un juguete muy habitual en muchas casas, el juego del laberinto de bolas de Ikea (foto).

Le gustaba mucho cuando era más pequeñito, eso de ir pasando las bolitas de un lado al otro siguiendo el recorrido del hierro le hacía gracia.

Hace ya un tiempo que tenemos el juego muerto de la risa porque ni lo mira. Asi es que hemos decidido darle un nuevo uso.

Le hemos sacado las cuentas (las bolitas de colores) y ahora jugamos con ellas a diversas cosas: poner las bolas de cada color en un cuenco diferente, meter por el agujero de las bolitas (potenciando asi la psicomotricidad fina) limpiapipas o cordones de los zapatos, las utilizamos de canicas gooordaaasss, o simplemente como pelotas.

Puede que sea la novedad del momento pero a dia de hoy las bolitas son un juguete que le entretiene y le gusta mucho.

Lo que tengo que buscar es una utilidad a los hierros retorcidos y la madera que ha sobrado... algo se me ocurrirá.. si no se lo mandaré a Inma que ella seguro que le encuentra utilidad ;)