viernes, 21 de marzo de 2014

Miedo a morir

El fin de semana pasado tuvimos una charla bastante intensa con el enano.

Estaba jugando tranquilamente con el juego del arte que nos había dejado Isi cuando me preguntó, "¿mamá Velázquez está muerto?", le dije que si, "¿y su mamá y su papá?", "también cariño, es que vivieron hace muchos años".

Yo seguía trabajando en el ordenador y volvió a preguntar "¿mamá El Greco también está muerto?", "también cariño". ¿"Todos los pintores de mis cuadros están muertos?", "pues si cariño todos están muertos".

Se hizo el silencio en la habitación y de pronto le oímos sollozar casi en silencio, nos fuimos su padre y yo a hablar con él.

¿Qué ocurre?, ¿qué es lo que te preocupa?, ¿es porque están muertos los pintores?...., el pobre lloraba desconsolamente en mis brazos hasta que me dijo "¡No me quiero morir!".

Ahí estaba uno de los miedos más habituales de los niños con la edad de mi hijo, la muerte. Empiezan a ser conscientes del ciclo vital, se dan cuentan que las personas envejecen y que mueren, que cumplir años mola mucho pero que también te hace ser grande y ser grande significa que te vas a morir...

El pobre no tenía consuelo, no ya solo porque no quería morirse él sino porque tampoco quería que ni yo ni su padre nos muriéramos.

Fuimos muy cuidadosos con todo lo que le dijimos, le acompañamos en su mal rato, le explicamos que era muy pequeño para morirse que tenían que pasar muchos años, pero claro el concepto tiempo todavía no lo tiene muy asimilado.

Me dio mucha pena, pero entiendo que es una fase más por la que tiene que pasar y que tan sólo puedo acompañarle y resolverle todas las dudas que tenga.


¿Los vuestros también han pasado por esta fase?

7 comentarios:

  1. Ay pobre, qué penita me ha dado... :) bueno, tú misma dices la clave de llevar este tipo de cosas... acompañarle, intentar explicarle de tal manera que pueda ir entendiendo esto de la muerte... aunque no es un tema fácil, claro... creo que ayuda bastante a la hora de tratar este tema con los niños tener un apoyo visual... hay algunos libros en forma de cuento que hablan sobre ello y son además una buena forma de naturalizarlo... (ahora mismo no recuerdo el título de uno que me gusta especialmente, si me acuerdo luego me paso por aquí y te lo pongo).

    Me gusta tu forma de contar tus vivencias... me daré una vuelta más a fondo por aquí :) un abrazo.

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  2. La edad y la madurez trae esto, que el pensamiento de muerte aparezca, se haga real y en consecuencia la angustia. Es muy duro, pero es inevitable. Ya sabes que Rayo también pasó por eso. Fueron unos meses algo duros, pues quizá se dio cuenta demasiado pronto y a pesar de que estuvimos a su lado, le explicamos todo lo pasó mal. Pero después se pasa, lo asumen como parte de la vida. Pero es duro, sí. Mucho ánimo y miles de besos.

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  3. Nosotros estamos también en esa etapa y curiosamente también surgió trabajando en el cole el arte y haciendo preguntas sobre los pintores que estaban muertos y el sentimiento de él era el mismo , lloraba desconsolado!!Es una etapa pero que mal se pasa!Jolin!!

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  4. Pues mi hija todavía no ha pasado por esa etapa. Pero pobrecillos es que para ellos tiene que ser muy difícil entender la muerte. Yo creo que hay lo habéis hecho bien, intentar explicárselo y consolarles y ayudarles a pasar el mal trago.

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  5. Medusi aun es muy peque, así que me llevas la delantera en eso.
    Imagino que es duro porque tienen que asimilar esta "parte de la vida" con la que vivimos una vez tomamos conciencia de ello, pero imagino que poco a poco y con vuestra compresion lo acabara llevando mejor

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  6. A mí me tocó explicárselo cuando su abuelo, mi padre, falleció repentinamente el día en que el cumplía 4 años y teníamos organizada su fiesta de cumpleaños. Fue sin duda el peor día de mi vida. Aún ahora se angustia pensando en que al final todos morimos y la verdad es que cuando tenemos que ponernos a responder sus preguntas a veces yo misma soy la primera que me angustio, y es que no he superado del todo la muerte de mi padre. En fin como ya han dicho es parte de la madurez aprender a convivir con el concepto de la muerte pero sin duda es un momento duro para los padres tener que ayudar a nuestros hijos a comprenderlo.

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  7. ¡Qué penita! Este tema siempre es muy duro tanto para nosotros, como para ellos. Sin embargo, todos pasamos por ello. Se trata de darle mucho apoyo y tratar de resolver con cautela las dudas que nos va planteando. Hace tiempo escribí un post con algunos consejos para tratar este tema de un modo menos traumático. Os invito a que le echéis un vistazo porque os puede servir con vuestro peque. http://blog.fluff.es/2013/06/la-muerte-como-superar-el-tabu.html

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