Este verano hemos pasado unos días en la playa.
Yo no tengo cultura playera, mi vida, mis veranos han transcurrido en el pueblo, veranos eternos de casi tres meses, todos los fines de semana del resto del año, Semana Santa, puentes...
Mi marido si ha ido de pequeño a la playa y le gusta mucho, cuando empezamos a salir fuimos un par de veces, pero reconozco que la playa no es lo mio.
No me gusta ese calor húmedo, la mezcla de arena con crema, esa pegajosez, odio las aglomeraciones y más si son por pelearse por un metro cuadrado de tierra y lo de tostarse al sol no va conmigo.
Pero... tenía ganas de ir a la playa con el peque y el resultado ha sido GENIAL.
Hemos tenido suerte o eso creo, no hizo excesivo calor y el calor húmedo tan sólo lo sentí el último día.
La playa no estaba masificada, es más apenas había gente, elegías el sitio sin problemas, y el hotel/apartamento estaba muy bien situado y limpio.
El peque se lo ha pasado pipa, ha construido castillos, nos hemos enterrado en la arena, ha jugado con las olas, hemos buscado conchas, comido pescadito.... pero sin duda lo que más le ha gustado la piscina del hotel y la feria.
El agua del mar le sabía mal y ponía cara de asco, en cambio en la piscina del hotel estaba feliz, ha nadado muchisimo, se ha soltado un montón, ya bucea lo que puede con los manguitos, se tira desde el bordillo, se hace y nos hace aguadillas... le encanta el agua.
Nos lo hemos pasado bien, lo hemos aprovechado al máximo y seguramente repitamos (si la situación económica nos lo permite), pero unos días... a mi me tienes alli mucho tiempo y me aburro.
La playa me gusta pero compaginándola con un poco de turismo. El viernes nos fuimos a ver Cartagena y alguno de sus museos y lo disfrutamos, Eric es un enamorado de los museos, le gustan muchisimo y es fácil ir con él a verlos.
Para mi la playa este año tiene notable alto, aunque por supuesto sigo prefiriendo el Pueblo. Mañana os lo cuento.