Hay recuerdos de mi niñez que tengo grabados a fuego, algunos son agradables otros no tanto.
Uno de los que no son bonitos es el día en el que rompí sin querer un "adorno" del mueble del salón. Yo estaba jugando tan tranquila me tropecé, me dí en la cabeza con el mueble y el "adorno" salió volando.
Mi madre me chilló muchisimo y me gané un "cachete".
Recuerdo perfectamente lo que pensé en aquel momento "me he hecho mucho daño y ella se preocupa porque le he roto el jarrón".
El dolor no era tanto físico, era más decepción...
Cuando leí este cuento lo primero que se me vino a la cabeza fue esa situación.
"¿Puede pasarle a cualquiera?" es un libro de la editorial Cuento de Luz de Mar Pavón y Sonja Wimmer.
"Balzo es un niño que acompaña a su mamá de compras, el pobre se aburre mucho en la tienda (es una de esas tiendas donde no se puede tocar nada), pasa el tiempo y Balzo empieza a jugar y sin querer choca con una estantería y todo el contenido cae al suelo.
Su mamá se enfada muchisimo, el dependiente también y nadie parece preocuparse por el chichón de Balzo..."
Este cuento remueve muchas conciencias y lo hace porque no actuamos igual si un adulto rompe una cosa que si lo hace un niño ¡como si lo niños lo hiciesen aposta!.
Ante una situación similar tal vez hubiésemos sido más considerados con el adulto "no pasa nada, no te preocupes, le puede pasar a cualquiera, ¿te has hecho daño?", pero siendo un niño el que lo hace parece que tenemos que dar ejemplo, dejar claro que eso no se hace, que la conducta ha sido errónea, y tendemos a castigar e incluso nos enfadamos desproporcionadamente.
Al leer el cuento por primera vez ya os digo que recordé la situación en la que mi madre me gritó por romper el jarrón, pero también recordé lo injusta que he sido en alguna ocasión cuando el peque ha hecho algún estropicio.
Un cuento imprescindible que todos deberíamos tener en casa y leer de vez en cuando para recordar que los niños son personas y tienen derecho a equivocarse.
¿Qué me decís de las ilustraciones? ¿a qué son preciosas?.
¿Vosotros os enfadáis mucho cuando rompen algo los peques?
Pues las ilustraciones son una preciosidad! Me apunto tu recomendacion
ResponderEliminarSi, me suele molestar que rompa algo sobre todo si no es su casa, me da mucho apuro, pero es cierto lo que dices, tendemos a enfatizar mas en los peques que si lo hiciera un adulto
Da que pensar
Es cierto, las ilustraciones son muy chulas, y es verdad que enfatizamos más con los peques.
Eliminar"Da mucho que pensar"
Un besote
Me ha encantado tu recomendación! Ya lo he pedido a Amazon!
ResponderEliminarGracias, un besillo
Que rápida eres!!, ya verás como es una gran compra. Un besote
EliminarPues la reflexión estea muy bien, toda la razón la verdad.
ResponderEliminary las ilustraciones muy chulas :)
Gracias, las ilustraciones son espectaculares.
EliminarYo quito del alcance del niño todo lo que pueda llegar a romper, para no llegar a ese tipo de situaciones. Tampoco se me ocurriría comprar un jarrón sabiendo cómo puede acabar. Llevas mucha razón al decir que los niños son personas, esto no siempre es tenido en cuenta. Un beso.
ResponderEliminarPensamos que podemos enfadarnos más con ellos porque tenemos "la verdad absoluta"
EliminarEstán chulas las ilustraciones, sí :)
ResponderEliminarLa verdad es que a veces regañamos demasiado. Tendemos a desahogarnos con el que sabemos que no nos puede responder demasiado... Pero está bien ser consciente para intentar cambiarlo.
Creo que es un libro imprescindible para tener en casa y leer de vez en cuando, pero no el niño, leerlo los adultos y revisar nuestros actos
EliminarMe parece un libro precioso, tanto por las ilustraciones que son una pasada como por la temática.
ResponderEliminarGracias guapa
EliminarYo no, es q yo tambien he sido niña y todos somos personas. Las cosas solo tienen el valoemr q quieras darle. Yo les suelo reñir cuando me ignoran cuando les digo algo o les aviso de q algo es peligroso y no hacen caso o cuando tiran cosas deliberadamente aunq les diga q no lo hagan.
ResponderEliminarMe gusta el libro, lo compraremos.
Yo reconozco que he tenido momentos en los que me he pasado regañándole
EliminarYo les digo a mis hijos en las tiendas que no toquen nada... ¡¡y luego me ven a mí toquetearlo todo, que yo soy muy de tacto, jajaja!! No nos damos cuenta de las incongruencias que cometemos con ellos, ni de que son personas, nos acostumbramos a que sean apéndices que arrastramos de un lado a otro... qué pena!
ResponderEliminarTu misma lo has dicho, es una incongruencia, nosotros les decimos una cosa y hacemos otra
EliminarMe gusta esa frase que leía hoy en "el patio" : "No te preocupes si tus hijos no escuchan todo lo que les dices, ven todo lo que haces"... creo que era algo así y la dijo Teresa de Calcuta...
ResponderEliminarPues eso...
Precioso libro, sin duda.
Bss
Muy buena frase, me la apunto.
EliminarGracias por pasarte